Hermano Lizardo
Algunos dicen que las brujas no existen, pero tienen la incertidumbre sobre esa realidad. Las brujas sí existen y quizá puede ser su propia vecina, o una amiga, y ¿porqué no? Podría ser un familiar suyo.
Debemos tener mucho cuidado con la brujería, y ante todo de quienes la practican. Las brujas son capaces de colocar maleficios, mal de ojo, salar negocios y destruir hogares. Muchas enfermedades misteriosas son ocasionadas por practicas de brujería, hechicería y magia negra. Muchos fracasos económicos son producto de una acción de brujería o hechicería, y muchas parejas se destruyen armónicamente, llegando incluso al divorcio y hasta el odio debido a hechizos o brujerías.
Una buena manera de cuidarse de la brujería, y de las brujas, claro está, es rezando la Oración del Mártir de los Desaparecidos todos los días al levantarse, al medio día y al irse a dormir. Sin embargo, no basta rezar pues muchas brujas poseen unos poderes diabólicos tan grandes que destruyen cualquier oración. Es preciso cerrar su cuerpo contra la brujería. El cierre del cuerpo solo lo hace un espíritu llegado de los Quintos Apurados, encarnándose en un cuerpo físico.
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