Hermano Lizardo
En anteriores artículos hemos escrito sobre los Quintos Apurados. En el mundo de los espíritus existen dos estados por los cuales pasan las entidades espirituales.
La primera consiste en deambular en la cuarta dimensión; un estado entre lo material y lo espiritual. Cuando una persona muere, su espíritu se marcha para la cuarta dimensión. Allí permanece inconsciente durante mucho tiempo, quizá años. El espíritu no sabe, no es consciente que ha dejado su cuerpo, y es cuando en muchas ocasiones vemos esa entidad espiritual plasmada en el mundo material. Son aquellos momentos cuando se aparece a ciertas personas, a veces a sus familiares, y estos dicen que ven un fantasma. En otras oportunidades hacen ruidos que asemejan a los ocasionados por objetos materiales.
Después de un buen tiempo (muchas veces transcurren varios años, o muchos) ese espíritu asciende a los llamados Quintos Apurados. Ese es un lugar celestial, sublime, abstracto; digamos que es un sitio como gaseoso, donde los espíritus son conscientes que hace mucho tiempo dejaron su cuerpo físico para retornar al Círculo Hermético; el Eterno Retorno, o Rueda de Samzara, como se conoce en los estudios esotéricos.
Los espíritus que permanecen en los Quintos Apurados son los que hacen milagros; retornan a la tierra cuando son invocados para servir a la humanidad terrestre. Son muchos los espíritus que sirven al mundo material, quienes en la actualidad descansan en los Quintos Apurados.
Que interesante teoria
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